¿QUÉ ES LA MEDICINA COMPLEMENTARIA?

La historia de la medicina tiene su origen en la prehistoria de la humanidad en el tratamiento de las enfermedades del ser humano. Los sanadores estaban familiarizados con la flora del lugar donde residían, y con sus facultades medicinales y tóxicas. Un personaje importante en la Medicina fue Hipócrates de Cos, ya que implementó la Clínica como instrumento para diagnosticar las enfermedades. Afirmaba que las enfermedades y los fenómenos fisiológicos no eran producto de la actividad y del capricho de los dioses, sino que estaban sometidos a leyes naturales y permanentes.

Uno de los precursores más importantes de las terapias complementarias y del regreso a los conceptos hipocráticos fue Samuel Christian Frederic Hahnemann, creador de la Homeopatía. En los últimos años las terapias alternativas y /o complementarias han adquirido un gran impulso fundamentalmente por: El poco tiempo que el médico alópata destina a la consulta, el deterioro de la relación médico alópata – paciente, la mala imagen pública que han ido adquiriendo. Los malos o escasos resultados obtenidos por algunos pacientes con los tratamientos alópatas (convencionales).

La despersonalización y deshumanización derivadas de los grandes avances tecnológicos, que sólo han mejorado en forma muy importante la capacidad diagnóstica, pero sobre todo, los efectos colaterales de los fármacos alopáticos. La Organización Mundial de la Salud; la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los estados europeos y muchos países del mundo están fomentando el uso de estrategias terapéuticas con terapias complementarias y tradicionales, por su eficacia y bajos costos además del énfasis en las relaciones terapeuta-paciente. Dentro de las terapias complementarias, destacan algunas como la Homeopatía, Acupuntura, Nutrición, Fitoterapia, Terapia neural, Par bio-magnético, etc. Con respecto a la homeopatía, el enfoque de la Academia de Medicina Integrativa es actualizar sus principios doctrinarios pero con el enfoque de la Biomedicina contemporánea. Recordemos que sólo existe una medicina y muchos métodos terapéuticos, cada uno de ellos con el marco teórico de la época en que fue descubierto y es muy probable que siga funcionando y ayudando a los pacientes, sin embargo, no nos podemos quedar en el pasado ya que el ser humano evoluciona de acuerdo a las distintas épocas, a los adelantos científicos y tecnológicos que le toco vivir, acorde también a la sociedad y cultura. Por tales motivos hay que actualizarse ya que paradigma que deja de funcionar, paradigma que debe ser renovado.